Es un bloqueo en los conductos que transportan la bilis desde el hígado hasta la vesícula biliar y el intestino delgado.
Ver también:
Obstrucción biliar
La bilis es un líquido secretado por el hígado que contiene colesterol, sales biliares y productos de desecho como la bilirrubina. Las sales biliares ayudan a que el cuerpo descomponga (digiera) las grasas. La bilis sale del hígado a través de las vías biliares y se almacena en la vesícula. Después de una comida, es secretada en el intestino delgado.
Cuando las vías biliares se obstruyen, la bilis se acumula en el hígado y se desarrolla ictericia (color amarillo de la piel) debido al aumento de los niveles de bilirrubina en la sangre.
Las causas posibles de obstrucción de las vías biliares abarcan:
Entre los factores de riesgo se pueden mencionar:
La obstrucción también puede ser causada por infecciones, lo cual es más frecuente en personas con sistemas inmunitarios debilitados.
El médico o el personal de enfermería lo examinarán y palparán la vesícula biliar.
Los siguientes resultados de exámenes de sangre podrían deberse a una posible obstrucción:
Los siguientes exámenes se puede utilizar para investigar una posible obstrucción de las vías biliares:
Una vía biliar obstruida también puede alterar los resultados de los siguientes exámenes:
El objetivo del tratamiento es aliviar la obstrucción. Durante un CPRE, se pueden eliminar los cálculos usando un endoscopio.
En algunos casos, se requiere cirugía para hacer una derivación y esquivar la obstrucción. La vesícula biliar por lo general se extirpa quirúrgicamente en caso de que la obstrucción biliar se deba a cálculos biliares. El médico puede prescribir antibióticos en caso de sospechar la presencia de una infección.
Si la obstrucción es causada por cáncer, es posible que sea necesario expandir la vía biliar por medio de un procedimiento denominado dilatación percutánea (a través de la piel al lado del hígado) o con endoscopio. Es posible que sea necesario colocar una sonda para permitir el drenaje.
Si la obstrucción no se corrige, puede conducir a una infección potencialmente mortal y a una acumulación peligrosa de bilirrubina.
Si la obstrucción dura mucho tiempo, se puede presentar enfermedad hepática crónica. La mayoría de las obstrucciones pueden tratarse con endoscopia o con cirugía. Las obstrucciones causadas por cáncer a menudo tienen un pronóstico desalentador.
En caso de no haber tratamiento, las posibles complicaciones abarcan infecciones, sepsis y enfermedad hepática, como la cirrosis biliar.
Consulte con el médico si nota un cambio en el color de la orina y las heces o si desarrolla ictericia.
Sea consciente de los factores de riesgo que tiene, de manera que pueda recibir un diagnóstico y tratamiento oportuno en caso de una obstrucción de una vía biliar. La obstrucción en sí no se puede prevenir.
Afdhal NH. Diseases of the gallbladder and bile ducts. In:Goldman L, Schafer AI, eds. Cecil Medicine. 24th ed. Philadelphia, PA: Saunders Elsevier; 2011:chap 158.